Colegio San Antonio De Padua de

Martos

Totalmente de acuerdo con la reseña de José Alberto Díez García en relación a la educación y formación recibida en el colegio San Antonio de Padua. Comparto también su concepto de amistad surgida en la infancia y adolescencia pues es eterna al quedar ligada a nuestra personalidad. Yo también daría un mundo por recuperarla. Por ello he mandado dos correos a la Secretaría del colegio expresando mi consentimiento y agradecimiento para que se le reenvíen y restablecer el contacto -que no la amistad ya que ésta nunca se perdió-, si José Alberto lo considera oportuno, como creo.

¡Oh sorpresa! Esta mañana lluviosa me picó cierta nostalgia y se me ocurrió intentar recuperar algo el pasado -ya algo lejano- e intentar acceder a alguna fotografía actual del colegio San Antonio de Padua. Y (¡sorpresa!) me encuentro con la respuesta de Fausto Díaz Padilla, que leo atentamente intentando desentrañar el fondo del debate planteado. Sea el que fuere, yo voy a dar mi opinión sobre mi estancia en el colegio también entre los años 1962 y 1967. En el aspecto positivo se nos proporcionaron unos disciplinados hábitos de estudio y también una suficiente base cultural en las asignaturas de letras (aunque deficiente en las científicas). Ambos aspectos desembocaron en que al acceder el 1968 al instituto Antonio Machado de Soria por la rama de letras los resultados fueran muy aceptables hasta el punto de, tras aprobar Preu, conseguir una beca salario gracias a la cual pude seguir pasos profesionales muy parejos a los que Fausto enumera. Otra cosa era la formación: muy religiosa quizás, pero poco humana (a menudo recuerdo que fuy compañero de curso durante cinco años de al menos veinte alumnos externos a los que tenía prohibido decir ni "buenos días", por no hablar de los arbitrarios y abundantes castigos cuando solo éramos unos niños). Pero, una por otra, salí con la formación suficiente para andar por la vida con decoro. Dicho esto, mi alegría es inmensa por la grata sorpresa de saber de Fausto, con quien compratí (junto a Abel Quintana Samaniego entre otros) estudios, mesa en el refectorio, equipo de fútbol y por mi parte profunda amistad. Por recuperarla con ambos daría un mundo.

A la vez que colegio,es convento de Franciscanos donde paso dos días en Agosto hospedado

He estado en la iglesia

Buen colegio que ofrece una formación competente.

Mi colegio y la base de mi educación y mis valores. Excelentes profesionales, pionero en innovación en todas las áreas. Los alumnos reciben una formación integral y salen altamente preparados. Todas las promociones del Colegio destacan por tener alumni en puestos y trabajos de responsabilidad.

El mejor colegio de Martos sin duda una enseñanza muy buena y clases perfectas para un buen estudio sin duda el mejor colegio si quieres que tus hijos tengan muy buena enseñanza

El mejor colegio del mundo civilizado. El mejor pueblo de Europa.